You are here
Monocotyledons / Monocotiledóneas
Vanilla P. Mill.
EOL Text
Flowering Apr.
License | http://creativecommons.org/licenses/by-nc-sa/3.0/ |
Rights holder/Author | eFloras.org Copyright © Missouri Botanical Garden |
Source | http://www.efloras.org/florataxon.aspx?flora_id=1&taxon_id=242102047 |
Barcode of Life Data Systems (BOLDS) Stats
Public Records: 1
Specimens with Barcodes: 1
Species With Barcodes: 1
Vanilla planifolia (V. fragrans, in some classifications) is a species of vanilla orchid native to tropical evergreen forests of eastern Mexico and the Caribbean watersheds of Guatemala, Belize, and Honduras (FNA 2011). It is a primary source of vanilla flavoring. Often referred to as “vanilla,” other common names are flat-leaved, Mexican, or Bourbon vanilla (GRIN 2011).
Like all members of its genus, V. planifolia is an herbaceous perennial vine with a long fleshy climbing stem and adventitious roots that can attach to trees or penetrate soil. Flowers are greenish-yellow, fragrant, and waxy, with a diameter of 5 cm (2 in). The plant has many dainty flowers, and several will open at a time, but each flower lasts only a day. In their native range, flowers are pollinated by small euglossine bees (Encyclopedia Britannica 1993, FNA 2011), but fewer than one percent of flowers are pollinated in the wild. To ensure fruit in cultivation, flowers must be pollinated manually, during the morning; and pollinators can pollinate about 1,000 flowers per day (Wikipedia 2011). If pollination does not occur, the flower is dropped the next day.
Fruit is produced only on mature plants, starting at two or three years old, which are generally over 3 m (10 ft) long. The fruits are 15–23 cm (6-9 in) long pods (often incorrectly called beans, but technically elongate, fleshy and later dehiscent capsules), filled with thousands of tiny globose seeds (0.3 mm diameter). Fruits mature after five to nine months. Yield varies from 30–150 capsules per plant. After harvest, the fresh vanilla pods have no aroma, but must be cured for four to five months—a process of drying and fermenting pods, which encourages secretion of vanillin in tiny crystals on the outside of the pod. Vanilla extract (vanillin) is obtained from this portion of the plant.
Vanilla was used to flavor xocoatl, a chocolate beverage of the Aztecs. Spanish conquistador Hernán Cortes drank it when he visited Montezuma’s court, and the Spaniards soon took vanilla to Europe, where it quickly became popular (Encyclopedia Brittanica 1993). Today, vanilla is used in numerous sweet foods and beverages, including chocolate, ice cream, and baked goods, as well as in cosmetics, perfume, and candles.
V. planifolia is cultivated in shaded areas in hot, wet, tropical climates. Global vanilla production in 2009 was 9.8 million tons from 73,480 cultivated hectares (FAOSTAT 2011). Although Madagascar and Mexico were historically the leading producers, Indonesia was the top producer in 2009, followed by Madagascar and China; Mexico was fourth. These four countries produced 88% of the world total. Smaller amounts are produced in Turkey, French Polynesia and Tonga in the Pacific, several African countries, and islands off Madagascar (Comoros and Reúnion). India formerly produced significant amounts, but diseases and pests have led to declining cultivation (Vanitha et al. 2011).
Vanilla has been cultivated and escaped or persisted in many tropical areas, including south Florida (including in Miami area and Everglades National Park (FNA 2011).
License | http://creativecommons.org/licenses/by-nc/3.0/ |
Rights holder/Author | Jacqueline Courteau, Jacqueline Courteau |
Source | No source database. |
Vanilla planifolia florece gregariamente, principalmente durante marzo-abril. Cada flor permanece abierta aproximadamente de las 7:00 a las 15:00 horas. Las flores son ligeramente fragantes, el olor varía un poco, siendo en algunos individuos similar al de algunas flores nocturnas como Hymenocallis o decididamente fragantes a canela. Análisis cromatográficos indican que la fragancia blanca (a flor nocturna) es debida a la presencia de linalool y que el olor a canela es debido a la presencia de 1-8 cineol (Soto, DaCosta y Alvarez-Buylla, datos no publicados). Vanilla planifolia es raramente visitada por insectos, aunque se ha visto a Euglossa viridissima visitar las flores y portar polen de esta especie (op. cit.). Se sabe que Euglossa viridissima es fuertemente atraída por el 1-8 cineol. La baja visitación, la escasa producción de frutos, 1 en 100-1000 flores, sugieren la existencia de un mecanismo de polinización por engaño. Otras especies de vainilla, como V. pompona, tienen flores fuertemente fragantes y atraen a abejas Euglossine que colectan fragancias activamente del labelo de la flor, lo que nunca ha sido observado en V. planifolia (Soto, Dacosta y Alvarez-Buylla, datos no publicados).
Las semillas de las vainillas americanas con frutos fragantes son probablemente dispersadas por murciélagos.
Vanilla planifolia parece ser una especie bien adaptada a la hiperdispersión de sus poblaciones. Las abejas euglossine son bien conocidas como polinizadores a largas distancias y el sistema de polinización por engaño ha sido planteado como característico de poblaciones con muy bajas densidades (Ackerman, 1986).
En V. planifolia existen clones autocompatibles y clones autoincompatibles. Uno de los clones autoincompatibles es el cultivar 'Oreja de burro' que es hasta donde es posible, eliminado de las plantaciones donde se presenta, pues implica que las plantaciones son improductivas al no formarse frutos con la técnica de polinización artificial.
Los distintos individuos de V. planifolia presentan un porcentaje variable de frutos formados por autopolinización. Ackerman (1995) y Childers et al. (1959), reportan cerca de 1% de frutos formados espontáneamente por autopolinización, mientras que Hernández (1997) reporta hasta 6% en especímenes oaxaqueños. Es muy probable que este porcentaje sea aún mayor (e.g. 20%) en otros especímenes silvestres.
Fenología
Vanilla planifolia florece durante los meses de marzo-abril y la floración es algo variable entre años y más bien gregaria o sincrónica en un área. Ocasionalmente florece de febrero a mayo. La floración es aparentemente inducida por las bajas temperaturas invernales seguidas de condiciones muy iluminadas en la primavera (Childers et al., 1959; Soto, obs. pers.,). La maduración de los frutos toma de 10 a 12 meses y los frutos se abren y tornan aromáticos a partir de marzo. En las plantaciones se colectan aún inmaduros, preferentemente en diciembre.
El crecimiento más activo se presenta durante la temporada de lluvias, principalmente entre agosto y noviembre y hay poco crecimiento durante la primavera (Hernández, 1997).
License | http://creativecommons.org/licenses/by-nc-sa/2.5/ |
Rights holder/Author | CONABIO |
Source | http://www.conabio.gob.mx/conocimiento/ise/fichasnom/Vanillaplanifolia00.pdf |
Relevancia de la especie
El género Vanilla incluye la única especie de orquídea de importancia económica, aparte de las especies ornamentales. Vanilla planifolia es uno de los cultivos más importantes que se originaron en México; los frutos producen la vainilla comercial una vez que las cápsulas carnosas se deshidratan y fermentan (Smith et al. 1992). Las 107 especies de Vanilla están ampliamente distribuidas en las zonas bajas de los trópicos del Viejo y el Nuevo Mundo, pero solamente dos especies aparte de V. planifolia, se cultivan en menor escala: V. pompona Schiede y V. thahitensis J.W.Moore. Otras especies americanas también producen frutos fragantes, pero raramente se utilizan como fuente de aromatizantes.
Las exportaciones de vainilla generan a los países productores entre 60 y 80 millones de dólares por año (Smith et al., 1992), tal vez más en los últimos años. Se dice que a principios del siglo XX las divisas que recibía México por la exportación de vainilla eran solo superadas en cantidad por las divisas derivadas de la exportación de la plata. Falta de planeación, de transferencia de tecnología, conversión de las zonas de cultivo en campos petroleros y problemas sociales, mantienen actualmente a la vainilla como un cultivo prácticamente sin importancia en México. La producción mundial está centrada actualmente en Madagascar, Reunión, Islas Comoro, Indonesia y Seychelles.
No se sabe que V. planifolia tenga alguna importancia ecosistémica. Sin embargo, las plantaciones de vainilla son un cultivo ecológicamente importante en el trópico cálido húmedo, especialmente cuando se comparan con cultivos anuales y zonas de pastoreo, ya que son agrosistemas forestales, con especies arbóreas perennes y estructura de la vegetación compleja que permite el mantenimiento de parte de la biodiversidad original, incluyendo la existencia de hábitat silvícola para animales arbóreos. Extensiones importantes de vainillales pueden tener efectos notables en el mantenimiento de los ciclos biogeoquímicos en el trópico cálido húmedo.
El cultivo de vainilla es muy demandante en términos de mano de obra. En realidad esto representa una ventaja y fuente de trabajo en zonas económicamente deprimidas del trópico cálido húmedo. El trabajo requiere de mayor organización, ya sea comunitaria o empresarial, que otros cultivos. En México la producción en zonas indígenas se ha visto severamente limitada porque los distintos grupos étnicos raramente están organizados para producir de manera colectiva en una misma parcela y en una familia no dispone de la suficiente fuerza laboral para mantener un vainillal tecnificado. Además, existe una diferencia muy grande entre la cantidad de trabajo que requieren cultivos anual como el chile, el maíz, o incluso el café, con la mucha mayor cantidad de mano de obra que requiere un vainillal. Es una práctica común que los vainillales queden lejos de las casas de los dueños y que solo sean visitados uno o dos días a la semana, lo cual es insuficiente. Estas prácticas han determinado que el cultivo de vainilla en México sea por una parte en acahuales, de manera tradicional, sin riego, con bajas densidades de bejucos, poco productivo, sobre todo en zonas indígenas y que los cultivos más tecnificados se presenten entre particulares, aunque actualmente se han estado tecnificando algunos ejidos sobre todo en el norte de Veracruz. Aún los cultivos mexicanos tecnificados son poco planeados y hasta cierto punto rudimentarios cuando se comparan con los otros países. A la larga los cultivos tradicionales y poco tecnificados han resultado ser un grave obstáculo para el desarrollo de la producción nacional de vainilla.
La vainilla era bien conocida desde tiempos prehispánicos. Bernal Díaz del Castillo la menciona como un ingrediente del 'Chocolátl' que bebía Moctezuma. Fray Bernardino de Sahagún, menciona que el 'tlilxóchitl' como la llamaban los aztecas, era vendida en los mercados indígenas. La vainilla se menciona en el Códice Barberini (Cruz-Badianus) de 1552, como remedio para la fatiga y para aromatizar chocolate. En la segunda mitad del siglo XVI la vainilla era utilizada en la elaboración de chocolate en España (Correll, 1944).
Se desconoce desde cuando se ha cultivado, pero aparentemente crecía en el Jardín de Oaxtepec, durante los tiempos de Moctezuma II (Nuttal, 1923; Ospina, 1997). La vainilla se exportó a España en pequeñas cantidades hasta el siglo XVIII, teniendo España el monopolio de su comercio. En 1676 William Dampier observó plantas de vainilla en la Bahía de Campeche y en Bocas del Toro, Panamá, dando alguna información sobre la forma en que crecía y como se curaban los frutos, aunque es probable que las plantas que él observó no fueran V. planifolia, que no es nativa de esas áreas.
Fueron varios los intentos por llevar la vainilla a Europa. En 1739 Robert Miller llevó a Inglaterra esquejes probablemente de Vanilla insignis, procedentes de la Bahía de Campeche, pero no prosperaron. Vanilla planifolia fue introducida de las Antillas a Europa por el Marquéz de Blanford, floreciendo un año después en la colección de Charles Greville, en 1807. Un año después fue descrita como Vanilla planifolia por G. Jackson con base en el mismo ejemplar de Greville.
La migración de Vanilla planifolia hacia los trópicos del Viejo Mundo parece haber seguido sólo dos o tres rutas distintas, vía Filipinas, vía Inglaterra y tal vez vía Francia. Blanco (Flora de Filipinas 2: 593. 1845) describió una vainilla con frutos aromáticos del Monte de Majaijai, Filipinas, como V. majaijensis; ya que no existen vainillas con frutos aromáticos en el sureste asiático, Blanco debe haber descrito a V. planifolia, probablemente llevada allá cuando existía un comercio importante entre México y Filipinas por ser ambas colonias de España. Hamelin llevó plantas de vainilla (V. tahitensis, V. planifolia o ambas) a Tahití, en 1848, procedentes de Manila, donde posteriormente se estableció como un cultivo importante de la Polinesia Francesa. Por otra parte el espécimen tipo de V. planifolia, introducido a Inglaterra por el Marquéz de Blanford, fue propagado, habiendo sido mandados esquejes a los jardines de Ambéres y París. De Ambéres pasó al Jardín Botánico de Buitenzorg (hoy Bogor), en Java en 1819, donde Blume la describió como V. viridiflora en 1825. Para 1846 ya existían plantaciones bien establecidas en Java y posteriormente fue un cultivo importante en Indonesia.
Se dice que Vanilla planifolia fue introducida a Reunión (Ridley, 1912) en 1793, desconociéndose el origen del material, pero no fue un cultivo importante hasta que se descubrió la polinización artificial en 1841. De Reunión la vainilla pasó a Mauricio y cerca de 1840 a Madagascar. Ya para 1886 la producción de vainilla en las Islas Mascareñas (Reunión, Mauricio y Rodríguez) y Java era mayor que en México (Mallory, et al. 1942). La variación genética de las vainillas cultivadas fuera de México parece ser extremadamente pobre por haberse originado del ejemplar tipo y otros pocos esquejes, lo cual ha sido confirmado en estudios genéticos en curso (M. France, com. pers.)
Se desconoce cuando empezó a cultivarse vainilla en México en grandes cantidades. La historia de la vainilla está repleta de anécdotas y datos poco confiables que no pueden ser verificados; el escrito mejor documentado es el de Bruman (1948). Mallory et al. (1942) indicaron que los Totonacas y dos tribus más cultivaban vainilla para los aztecas, lo cual no está suficientemente documentado. Se sabe que existen plantaciones en Papantla desde cerca de 1760. Antes de esta fecha la vainilla era probablemente colectada de plantas silvestres en el sur de Veracruz (Acayucan), el norte de Oaxaca (Teutila) y su comercio está documentado en Papantla desde 1743. Al final del siglo XVII cientos de miles de frutos eran exportados del puerto de Veracruz hacia Europa y éstos provenían de Misantla, Papantla y Teutila (Humboldt, 1811). De los mismos escritos de Humboldt (Voyage de Humboldt et Bonpland 2, pt. 3, p. 437 y Versuch uber den politischen Zustand des Konigreichs Neu-Spanien, 1812) se deduce que su cultivo y manejo era extenso en Veracruz y existía en alguna medida en Oaxaca, de donde provenía la 'vainilla de Teutila'.
El método de polinización artificial fue practicado en Europa en 1936 por Charles Morren y un esclavo, Edmund Albius encontró en 1841 una manera práctica para polinizar cientos de flores rápidamente (Correll, 1953). La polinización artificial se practicó en México desde poco tiempo después de 1840, aparentemente porque un miembro de la colonia francesa establecida en Jicaltepec, Veracruz, trajo la técnica a su regreso después de estudiar agricultura tropical en Francia. Casi inmediatamente la técnica fue adoptada por los Totonacos, resultando en un incremento espectacular de la producción de vainilla de la zona (Bruman, 1948). En 1942 cerca de 10,000 personas producían vainilla en el norte de Veracruz y se estima que 50,000 personas estaban involucradas en su producción y manejo en 1920.
El mayor auge en la producción de vainilla ocurrió antes de que se popularizara el uso de la vainilla sintética. En Madagascar se produjeron 875 toneladas en 1929-1930, para después decrecer y nuevamente aumentar hasta 1,000 toneladas en años recientes.
La demanda mundial de vainilla natural se sitúa actualmente en unas 4000 toneladas anuales, de las cuales se satisface sólo la mitad. De las 2000 toneladas que se producen actualmente Madagascar suministra casi la mitad, mientras que México contribuye de 5 a 30 toneladas por año, lo que contrasta con las cerca de 100 toneladas producidas a principios de siglo. La producción mexicana actual es comprada casi en su totalidad por la Compañía Coca-Cola. Debido a diferencias en el método de curado, que proporciona un bouquet característico, la vainilla de México sigue siendo la más valorada, aunque el dominio del mercado lo tiene la vainilla obtenida a partir de proceso Bourbon, en los territorios franceses y en el Indico. Gran parte de la producción mundial se destina a la industria de los helados, confitería, perfumería, como aromatizante del tabaco, del chocolate y en la elaboración de refrescos de cola.
El mercado de la vainilla natural sigue siendo afectado por la existencia de vainillina sintética, mucho más barata. Sin embargo, la vainilla natural es resultado de la mezcla de muchos compuestos distintos y la vainilla sintética no puede competir en calidad. Es muy probable que la vainilla natural, producida de manera tradicional a través de la deshidratación y el curado de los frutos permanezca y no sea desplazada por otros métodos, incluyendo desarrollos biotecnológicos recientes (véase RAFI 1987, CMR, 1988), tal y como el vino o el aceite de oliva mantienen o incluso han incrementado su mercado en años recientes.
License | http://creativecommons.org/licenses/by-nc-sa/2.5/ |
Rights holder/Author | CONABIO |
Source | http://www.conabio.gob.mx/conocimiento/ise/fichasnom/Vanillaplanifolia00.pdf |
Barcode of Life Data Systems (BOLDS) Stats
Public Records: 1
Specimens with Barcodes: 1
Species With Barcodes: 1